EUROPA
PRESS
20 enero
2021
Los
españoles engordaron una media de 5,7 kg desde el inicio de la pandemia
Los españoles han engordado una media
de 5,7 kilos desde que se inició la pandemia del coronavirus o, al menos, así
lo ha evidenciado un estudio llevado a cabo por Ipsos entre el 23 de octubre y
el 6 de noviembre y en el que se han analizado a ciudadanos de 30 países
diferentes.
A nivel general, un 31 por ciento de todos los encuestados
de todo el mundo ha visto cómo ganaba kilos desde que la pandemia entró en sus
vidas, con una media de 6,1 más, aunque un 10 por ciento ha conseguido perder
peso. La ganancia de peso puede ser el motivo de que tres de cada 10 ciudadanos
hayan hecho más ejercicio durante los últimos meses, si bien un 23 por ciento
afirma haber dejado de hacerlo.
En España se supera la media mundial en cuanto a ciudadanos
que reconocen haber engordado desde marzo del año
pasado, llegando a un 38 por ciento de la población, lo que sitúa en el sexto
lugar del ranking mundial y a la cabeza de Europa, seguidos por Italia (35%) y
Gran Bretaña (32%).
Sin embargo, el incremento medio de kilos ha sido de 5,7
kilos, lo que sitúa a España en la parte media-baja del ranking, por lo que, a
juicio de los expertos, a pesar de que haya sido uno de los países que más ha
engordado durante la pandemia, los kilos ganados han sido menos que en muchos
otros. De hecho, también se sitúa por encima de la media global y entre los
primeros países europeos donde más gente ha perdido peso, un 21 por ciento de
los españoles así lo afirma, solo por detrás de Gran Bretaña con un 24 por
ciento.
En cuanto al ejercicio físico, y quizá empujados por ese
auge que se vivió durante el confinamiento de hacer deporte en las casas con
apoyo de las clases 'on line', un 24 por ciento
reconoce que ha aumentado su actividad física. Ahora bien, son más lo que se
han dejado vencer por la pereza o las dificultades para realizar deporte al
aire libre, y un 27 por ciento reconoce que se mueve menos que antes de la
llegada del virus. En este caso, los españoles están entre los europeos que más
se han ejercitado durante estos meses, sólo superados por los ingleses.
Entre aquellos que han decidido librarse de esos kilos de
más que han cogido durante los últimos meses, un 45 por ciento a nivel mundial,
creen que la mejor forma de perderlos es volver a una alimentación saludable,
aunque sin llegar a ser una dieta estricta (52%), mismo porcentaje son los que
creen que lo más importante es hacer más ejercicio.
Hacer dieta, lo más efectivo para perder peso
Hacer dieta o reducir la ingesta de alimentos será lo más
efectivo para el 44 por ciento y beber menos bebidas azucaradas lo es para el
38 por ciento, así como ingerir menos alcohol para el 15 por ciento. En el caso
de España, uno de cada dos está intentando perder peso y, al igual que a nivel
global, para el 57 por ciento lo que más los ayudará a bajar esos kilos de más
será tener unos hábitos de alimentación más saludables, seguido de una
actividad física más intensa y frecuente (50%).
Asimismo, y aunque para cada 4 de cada 10 españoles lo mejor
es hacer dieta y reducir la cantidad de alimentos ingeridos, para un 31 por
ciento tomar menos bebidas azucaradas es determinante y un para 2 de cada 10
beber menos alcohol también ayuda bastante a bajar peso.
Para los que apuestan por llevar una alimentación más
saludable para quitarse los kilos de encima que han ganado estos últimos meses,
el 62 por ciento de los ciudadanos a nivel global apuestan por reducir el
azúcar de su dieta, seguido de las calorías (41%), los carbohidratos (39%), la
comida procesada (31%) y las grasas saturadas (28%).
Los españoles comparten la importancia de la reducción del
azúcar en la dieta para conseguir bajar de peso (65%), pero en segundo lugar
sitúan la eliminación de comida procesada (46%), siendo los ciudadanos a nivel
mundial que más importancia le dan a este factor. Le siguen la reducción de la
ingesta de calorías (38%), los carbohidratos (25%) y las grasas saturadas
(37%).
Por otro lado, el estudio ha evidenciado que el 10 por
ciento de los españoles reconoce haber aumentado la ingesta de alcohol y un
siete por ciento admite que ha bebido menos alcohol en los últimos meses. En
este apartado, España ocupa el puesto 16 en el ranking de países que han
incrementado el consumo de alcohol y es de los países europeos con menos
consumo, sólo por detrás de Francia (6%) e Italia (9%).
En cuanto al tabaquismo, un cuatro por ciento admite que ha
dejado este hábito, el mismo porcentaje que ha caído en él durante la pandemia,
lo que sitúa a España entre los 6 primeros países que más ciudadanos han
empezado a fumar.
Hábitos que reducen la gravedad de los síntomas de la
covid-19
Ipsos ha preguntado también a los ciudadanos cuáles creen
que son los factores que pueden agravar los síntomas de la enfermedad en caso
de contraerla, observando que, a nivel global, ser activo físicamente es el
percibido como más beneficioso en caso de ser positivo (38%), seguido de dejar
de fumar (28%) y tomar suplementos de vitamina D (26%).
También ha habido muchas informaciones sobre que el
sobrepeso puede agravar la enfermedad, por eso un 17 por ciento señala la pérdida de peso como algo importante para reducir
la incidencia del virus. En España cambia un poco este orden, ya que para el 39
por ciento lo que más puede reducir el impacto del coronavirus sería dejar de
fumar, seguido de la práctica habitual de ejercicio (25%), la pérdida de peso
(20%) y el consumo de suplementos de vitamina D (18%).
Finalmente, y sobre la opinión que tienen los consumidores
sobre si los gobiernos y la propia industria de la alimentación podrían hacer
algo para ayudarles a perder peso, a nivel global el 42 por ciento piensa que
la medida más efectiva sería abaratar los precios de la comida saludable,
seguido de habilitar espacios verdes para practicar deporte (22%).
Conseguir que las tablas nutricionales de los productos y
alimentos sean más claras (13%) y fabricar productos más saludables (12%)
serían las siguientes medidas más apoyadas. Por su parte, para los españoles,
las medidas que podrían tomar el Gobierno y la industria para ayudar a perder
peso sería abaratar los precios de la comida saludable (44%), habilitar
espacios verdes para practicar deporte (18%), conseguir que las tablas
nutricionales de los productos y alimentos sean más claras (16%) y en cuarto
lugar, incluir ingredientes más saludables en los alimentos procesados (13%).